Mujer e Inteligencia Emocional Financiera
¿Cómo somos en general las mujeres en relación al dinero? ¿Nos sentimos GENERADORAS de dinero o más bien ADMINISTRADORAS del dinero que nos provee un otro?
Hace 10.000 años y durante siglos y siglos, el hombre salía a cazar, a buscar la fuente de alimento (lo que hoy compramos con dinero) y la mujer tomaba el rol de criar a la familia. Ella no ocupaba su mente en obtener alimentos, en generar, si no que se concentraba en cuidar; en cuidar a sus hijos física y emocionalmente.
Durante muchos SIGLOS a las mujeres nos proveyeron «con los recursos para empezar», siempre dependiendo de un otro. El hombre proveia y la mujer administraba lo que él le daba para ese día, para ese mes. Es por ésto que a mi forma de ver, las mujeres estamos menos “entrenadas” en generar fuentes de alimentación, fuentes de ingresos y estamos muy entrenadas en ADMINISTRAR, en administrar los alimentos para nutrir bien a nuestra familia, administrar la vestimenta y todo lo que se requiere para que el “sistema familiar” funcione.
Poco a poco ésto fue cambiando y la mujer comenzó a GENERAR. Sin embargo, en mi punto de vista, seguimos poniendonos un TOPE, un techo a lo que generamos. Seguimos inconscientemente sintiendo y hasta un punto queriendo, buscando y hasta a veces “necesitando” que un OTRO NOS PROVEE, nos cobije, nos cuide y por lo tanto limitándonos.
Tenemos inclusive, creencias muy profundas que vienen desde el inconsciente colectivo (de generaciones pasadas en sus formas de generar y administrar los recursos) de que el hombre tiene que generar más que la mujer lo cual lleva a muchas mujeres a no permitirse inconscientemente generar más que el hombre!
Muchas mujeres tienen las creencia de que » las mujeres no somos buenas con los números», «que es de materialista hablar de dinero porque para nosotras las relaciones son más importantes» (¡como si hubiera que elegir entre uno u otro!).
Dichas creencias también nos llevan a que nos cueste, por lo general, hacer valer nuestro trabajo, a ponerle precio a nuestro producto o servicio y ni qué hablar a pensar en INVERSIONES. Porque nuestro foco, nuestro objetivo está inconscientemente más centrado en SERVIR, AYUDAR, DAR, CUIDAR, como lo hacíamos “en la época de las cavernas” por decir algo que en GENERAR. ¡Eso lo ponemos en un segundo plano!
Es por ésto que siento la profunda misión de acompañar a las mujeres en el desarrollo de nuestra Inteligencia Emocional Financiera. En acompañarlas a que atraviesen los números por el corazón, conectándo con los beneficios EMOCIONALES que nos trae el darle un lugar más saludable al dinero en nuestras vidas.
Tenemos un rol muy importante en nuestra sociedad como mujeres y como madres. Es clave que poco a poco dejemos de sembrar ésas creencias que nos limitan y vayamos sembrando nuevas creencias con respecto a nuestro rol en relación al dinero CREYENDO PROFUNDAMENTE que somos protagonistas en construir la vida que ELEGIMOS.
¡Te mando un fuerte abrazo!
Vale